Bajo la penumbra que atosiga el malestar de los días que sin rumbo innato lo malgasta todo el tiempo. El dulce cobijar del silencio cuando los recuerdos me persiguen, el caminar de las palabras en mi mente y el soberano placer de mantenerte aun conmigo. Escuchando como sucumben mis sueños caigo frente de ti, buscando en tus ojos una nueva esperanza, pero ya tus pupilas decaídas por el dolor de la entrañable nostalgia y el quemeimportismo que enajenado del amor solo menciona el olvido. Mi cuerpo y mi ser suplican, demuestran necesidad por que te reclaman como suyo en esencia y sentido, desde que te convertiste en el fundamento todo lo que hay, todo lo que sobrevive, y todo lo que persiste en un alma llena de valor pero que carece de optimismo, optimismo que el destino ha pisoteado, por que un alma fue dividida con el fin de seguir de pie. Un alma esplendida llena de vida que a la vez vive incompleta y sin esperanzas. Como se puede negociar un camino sin espinas, si la felicidad que se espera es solo una búsqueda hacia la tranquilidad , quien garantiza una vida sin problemas, si la superación y el crecimiento son permanentes reflejos de haber experimentado el dolor, quien se contempla majestuoso sin tener excelencia solo vive evitando el dolor para crecer en vacío, para crecer bajo la sombra del mas puro sentimiento “EL AMOR”.
