miércoles, 12 de febrero de 2014

Humos esperanza

El humo de la maldita condición por el cual daba razón, las cajetillas impropias que se convertían en mi diario, llevo consumido en el placer consiente del humo prominente, era la ironía del transcurrir de mis días por que ahí donde quien pintaba el corazón no existía mas que vacío, quien diría que se iría tras la voluntad que no permitía que le arrebatara su libertad, tengo un nudo en la garganta ya la voz de cigarro no me hace mártir, y aquel dejavu que se hizo impropio que no transciende sino desciende, y cada año recuerdo extrañarte a rabiar y las colillas que caen haciendo hueco en la cama me hacen saber que no soy el mismo de ayer, que si preguntas por mi sabrás que me estoy poniendo viejo y aunque todo parezca normal, yo vuelvo a fumar un cigarro en la mañana esperando si regresaras, esperando aunque se muy bien que ya no eres ni mi pasado ni mi presente, que aunque siendo la mujer perfecta creada en la mente mis complejos consumieron lo que sentías, y es que no estoy totalmente loco por que la vida es mas que un simple brillar, quien me entiende si aun no cesan mis hábitos por los cuales te aburriste de mi. El cenicero que formo mi corazón por las cenizas que olvide en cada noche cuando fume, cuando fume cada caricia, cada sentimiento que tu dabas por mi, aun cuando me arrepiento te sigo recordando en la sombra y las ganas de sentir no me dejan estar solo, pero quien soy yo para obligarte si ya no sientes lo mismo. Te perdí por una nube de humo que termino cicatrizando mi alma mas no mi corazón por que el ser que ama no debe ni tiene razón.

No hay comentarios: