sábado, 7 de diciembre de 2013

V.I.H “Duelo”

Vivo el duelo negro de la noche que no contagio a los disparatados hijos de la madrugada, este duelo insignificante que cruza fronteras y asemeja voluntades. Este duelo que contiene dolor, un vacío anhelante a la transición inmutable de convertirme en aire cuando aspiro a no ser. Este duelo de alcoba que no tiene malicia y convierte a los desesperados en inmundicia, traspasa la noche de prisa como si fuera de día y es de las oscuras estrellas que no brillan el denotarme la soledad angustiante. Duelo con soledad que no trasciende en la memoria de los que fijos de vida suelen describirse como dignos, dignos como palabra muerta en su torpeza dejar perecer a un ser que solo anhela crecer, y es que una flor sin un poco de agua se marchita, tal como marchito el corazón de aquel que por insignificante razón deja de creer. Vivo despierto mi duelo aunque el cielo no responda mis preguntas y ya las fuerzas con las que me animo no me tientan a seguir, vivo este duelo de muertos inciertos pues no es un infierno lo que tengo aquí. Vivo de un duelo y por que es que este duelo sin serlo aun sigue siendo mi grato veneno si pretendo salir, y es mi duelo el que en absurdas distancias a alejado al mundo de mi aunque aun tengo mucho que decir. Y es que vivo un duelo negro en cada noche cuando sucumbe mi ser por los crueles fastidios de la multitud que no entienden que mi ser solo quiere pertenecer.

“Este duelo que para muchos ha partido su seres profundas melancolías y que ya no saben si creer si existe arriba algún ser, ¿Que tan culpables son de padecer SIDA y estar en agonía? ¿Es que acaso este sufrimiento que ahora deben llevar como velo cada día no es suficiente como para que aun la gente los margine haciéndolos poco a poco desaparecer?”

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