Cuchillas a mis alas

El quejido deslumbrante que acompaño la pesadez de mis ojos donde la noche tienta mis pesares y el profundo delgado dolor que dejaste a la perturbación de cada uno de mis sentidos, donde las palabras no eran una virtud y callar era el todo para demostrar que estabas ahí. Me dabas una esperanza donde la nada fue exacta y solo puedo imaginar si las creencias que forje en tu pecho me hicieron renegar a los mil y un palpitares que vi narrados cual lapidas de ataúd, sabiendo humildemente que no eras para mi y es que me hice un mundo donde solo tus palabras eran la dueña de la razón, ese silencio penetrante en cada mirada que me conquistaba cual astro renaciente en mi cielo, me construí un mural donde no había lagrimas por que tu existencia lo era todo. No ves que mis quejidos son tu voz en el presente confirmado con sentimientos mal interpretados, no por mi sino por ti quien se dijo a si  mismo serme sincero, y cual halcón que tan fuerte me creí caí como una piedra en mar, donde no me daba más respirar haciendo de tu ausencia todo mis enormes sufrimientos y es que tu espalda me la diste, como cuchillas en mis alas borraste de mi mente mi guía y mi camino, pues sin alas no puedo volar. Has manipulado cada consecuencia en mi universo, cada influencia donde para ti nunca la traición fue cierta, por que decías que mis ideas eran infundadas por falta de pruebas, y cual más grande prueba que quitarme lo anhelado con tus mentiras que pronto se hicieron reales al caer tu inmenso disfraz, donde ese pañuelo de caballero me envolvió dándome vida con falsedad y del mar de mis dolores creíste haberme sacado para sumergirme en un estanque, donde como eco cada una de las cosas que decías me las aprendí de memoria y se convirtieron en todo lo que creí.

“De la esperanza de vivir lo vivido siento mi corazón destruido, si puedo entender puedo comprender que los errores son mundanos cual marchitar de la rosa que no es del culpar del inocente traicionado, si no del daño causado por falsas esperanzas que hacen como de niño el creer, pero que cuando se daña ya esa confianza se hecha todo a perder”